No Quiero estar sin ti

¿Cuantas veces no tuve esa pesadilla?, sin embargo despertaba y aún estabas aquí. Anhelaba tanto que sólo siguieran siendo pesadillas, jamás imaginé que me vería inmersa en esta realidad tan cruel. Perderte a ti, amada madre, ha sido el dolor más grande para mi. Tú no sabes los sueños que contigo te llevaste, mis cadenas de ilusión que contigo tejí, ahora se deshebran eslabón a eslabón. Necesito despertar de mi realidad vacía, aunque aún te siento, no puedo creer que ya no estés aquí. Miro tus fotos y tu mirada me sigue fija, te observe de un lugar u otro. Madre, yo te dije que siempre me harías falta, y que nunca dijeras que ya no querías seguir, sí tu te rendías yo lo haría contigo. Te dije que sin ti, yo no podría continuar, pero ahora veo que debo hacerlo, porque fue tu voluntad que yo siguiera. Necesito tus palabras, tus hermosas sonrisas, deseo tanto poder tenerte otra vez conmigo. Madre, yo soñaba aferrada, que antes de perder a alguien de mi familia, la muerte me tocara a mi, no quería sentir este dolor que me atenaza, siento la presión en el pecho, siento que tus manos aún me tocan, pero no me acaricias más. Temo ir al cementerio, y mirar la tumba de aquel cuerpo que en la vida que tuvimos juntas, me besó y me abrazó, me dijo, mi vida linda, mi niña chiquita, mi princesa, Chetito, Aniseto, Anabelita, mi hijita. Madre, aunque tenga este dolor, que siempre lo sufriré, te prometo salir adelante, con el amor de mi padre y de mis hermanos. Yo te juro que sin ti no quiero estar, pero te debo dejar descansar. Te amo mamita. Siempre te voy a extrañar. Tu recuerdo me envuelve, me rodea como ahora adornos florales rodean tu foto. Estarás presente en cada logro, en cada anhelo, en cada vivencia que tenga, la viviré por tí. Te amo.